La guerra y la post guerra todo junto es

 




Sueño.

Paso una puerta y entro a una especie de club. Nadie tiene barbijo y está Juampi que me mira y me hace una mueca de “qué boluda sos eh”
Supongo que me lo dice porque tengo barbijo.
“Boludo ¿qué haces acá?”
“Boluda ¡la asamblea!”
No entiendo nada pero aparentemente hay una asamblea que se convierte en griterío.
Todos salen corriendo y yo puteando porque nadie está con barbijo, hasta que salimos y desembocamos en Corrientes y Junín.
Vemos que en Callao está todo cortado con unos tachos que tienen fuego.
Sigo sin saber por qué protesta esta gente y menos por qué estoy yo acá, así que me corro hacia el costado pero me enganchan unos canas.
“No pero yo no tengo nada que ver” digo y me siento traicionera.
Pero logro sacármelos de encima y encaro por Junín para Córdoba porque tengo que tomarme el 106.
Está todo oscuro y me da miedo. La puta madre, tendría que haberme quedado en la protesta.
Me despierto y miro el teléfono. Las 3:34
¿Me habré despertado 3:33 y justo cambió?
En el ipad está uno de los videos de la lista UFOLOGÍA que me pongo para dormir y una mujer dice “SOLO QUIERO PAZ”
Yo también amiga.
Esto no se soporta más.
La guerra y la post guerra todo junto es.
“Era como una fotografía rota en la que yo tengo una parte y tú tienes otra” dice otro.
Hablan de un secreto sobre ovnis no revelado.
Me levanto para ir al baño y me miro al espejo.
Dios mío que vieja estoy. Qué injusticia.