Pierdo por donde se mire





Sueño

Estoy en una nave nodriza con otra gente.

Miro para atrás y en mi grupo está Kari que está toda roja. Me acerco y le digo “Qué pasa boluda?”

Kari se tapa la cara y  me dice “Boluda yo creí que viajar en cohete era lo mismo que viajar en avión”
No entiendo por qué no me acuerdo del cohete pero ahí me doy cuenta de que salimos de la Tierra en cohete y empalmamos en algun lugar para luego entrar en esta nave nodriza.

¿Cómo puede ser que no me acuerde del despegue, justo yo?

Abrazo un rato a Kari para calmarla y nos tenemos que mover hacia otro lado.

En la nave nodriza hay  mas gente y estamos todos separados en grupos.

De repente viene un grupo que pienso que es de una base en el espacio pero no. Son nuestros dobles.

Justo no está mi doble pero en cualquier momento siento que puede aparecer porque ahora acabo de entender que en la nave nodriza estamos personas de dos universos paralelos en convivencia.

¿Universos o planetas? No pregunto.

De repente cambia el diseño interior de la nave y para irnos a dormir (mi grupo y yo) tenemos que descubrir cuál es nuestro lugar.

Empezamos a caminar por la nave sin rumbo y con miedo porque sospechamos que los del mundo paralelo en realidad son unos soretes.

Al final damos con un lugar estanco como de descanso con unos sillones y en uno está sentada una mina bengalí.

Esta vestida con las túnicas típicas de la India y el tercer ojo pintado de azul.

Me mira y me dice “Yo soy la primera mujer de” y no escucho lo que sigue pero por contexto entiendo que ella es la original y que si aparece otra será la doble.

No se por qué lo plantea así.

Nos relata su vida y lo mal que la pasó desde salir de su lugar de origen hasta llegar a esta nave nodriza y mientras lo relata se proyecta en la pared todo lo que va diciendo, como pedazos de película.

La mina nos cuenta que vivía en India y para zafar se tuvo que prostituir y en ese momento se proyecta toda la escena de sexo en la pared con un señor muy gordo con un pito enorme y me da como una arcada pero disimulo. Pobre mina no voy a vomitar en medio de su anécdota.

Además ella se nota que está aguantándose las lágrimas.

Del relato de su vida cambia sin escalas a decirnos “Para poder entrar a su cuarto ahora tienen que ir a esa escalera”

Nos acercamos y la escalera está metida en un lugar inaccesible o sea estamos del lado del bajoescalera.

Intentamos estirarla y se convierte en una percha con ropa.

La puta madre ¿va a ser así? ¿Vamos a boyar todo el tiempo por esta nave?

Pasamos un rato más de laberinto y decidimos entrar a buscar ayuda al cuarto de unos amigos pero cuando entramos no eran nuestros amigos eran los del universo paralelo.

La puta madre capaz son malos.

De la nada aparece un tipo nuevo que no vi antes (ni a él ni a su paralelo) y me dice “Mirá podes irte por acá, si querés te acompaño”

Pasamos la puerta que me señala y ahora estoy en la calle.

Ay! Estaba en la nave nodriza y ahora estoy en Congreso.

Veo pasar el 12 y grito “Ay el 12! Estamos en la Tierra de nuevo?”

Acá ya estoy sola con este nuevo personaje, perdí al grupo, a Kari a todos.

“Sí” me dice y agrega:

“Lo que pasa es que estás acá para solucionar eso que no solucionás. Pero si volvés a entrar por esa puerta, volvés a la nave nodriza. O sea si te quedás en la Tierra es para solucionar tu quilombo”

La concha de la lora pierdo por donde se mire.

Me despierto