Yo no actué. Soy así.




Sueño que soy parte de un experimento, pero de esto me doy cuenta casi a final de sueño. 

Sé que hay una regla: si pasás por una calle que está por allá, viene un tipo y dispara. Sé de esta regla porque de repente me doy cuenta de que esto sucede tres veces seguidas y yo logro esconderme y observar.

Ahora me toca a mí pasar, o sea estoy yo adentro de la escena de la calle ancha con el tipo que que está viniendo de frente con el revólver. Dispara. De nuevo me escondo. 

Pasan los días, me olvido y vuelvo a pasar por ahí pero esta vez con parte de mi familia. 

Ese es el experimento. Ver como reaccionas. 

Cuando estoy caminando con parte de mi familia a mi izquierda, veo que viene el tipo de frente, veo que saca un revólver y yo atino a agarrar un bate de béisbol que está justo ahí para mí. 

Con el palo corro hacia un costado a mi familia para que no queden en la línea de fuego, pienso en términos de LÍNEA DE FUEGO, y me tiro hacia la derecha.

Ahí hago un par de destrezas a lo Rambo y salgo.

Doblo por la esquina, agarro mi celular que es el Alcatel chiquitito que tuve desde el 2004 hasta el 2011 o 12 y que se me cayó en la bañadera cuando me acerqué a saludar a mi sobrino que estaba en la bañadera; llamo al 911 y me atiende un tipo que me dice: “ROBER OIME”. 

Y se pone a hablar él de cosas. Corto. 

Intento llamar de nuevo y no hay manera de que me dé con el 911. 

Ahora estoy otra vez en la calle del tipo.

Y ahora de golpe estoy en Mar del Plata. Yo estoy en un edificio del movimiento moderno pero no puedo decir cuál es. No porque no pueda sino porque no recuerdo el nombre. La puta madre nunca se nada de nada. Ni del área en la que me formé ni de las áreas en las que no me formé.

Salgo por un puerta-ventana que da a una terraza y veo gente caminando por arriba de una arboleda.

No se hunden qué loco.

Ahí vuelve a ser la zona del loquito que dispara de frente. Una chica se me acerca, me da algo y me hace seña de que me ponga en el oído el teléfono.

Me acerco su teléfono que también es tecnología 2004/5 y del otro lado está el tipo que me atendió cuando llamé al 911 diciendo: “Lo de Robertita fue increíble. La sensibilidad con la que manejó la escena, el drama”. Sigue hablando, pero yo me saco a lo bruta el teléfono del oído por dos motivos: 1) No soporto halagos y 2) Ahí caigo: es un experimento, este tipo analiza las acciones de la gente y en base a eso nos contrata a los que pasamos bien el casting.

Casting del que no estábamos ni enterados.

Me da bronca ahora. Yo no actué. Soy así.

Me despierto.